lunes, 24 de enero de 2011

Ecopoesía San José - 2010


Por William Piscoya Chicoma

Con el título de Benjamines Sanjosefinos Cantándole a la Vida y al Planeta, con la denominación global de Ecopoesía San José 2010, y con el auspicio del Club de Leones Los Parques de Chiclayo y la Fiscalía de Prevención del Delito en Materia Medio Ambiental, Kathy A. Gonzáles Cruz y José R. Primo Bonilla -docentes del centenario y emblemático Colegio Nacional de San José-, acaban de publicar el resultado de un trabajo, ciertamente, relevante: el Primer Concurso de Poesía Ecológica (Ecopoesía 2010), realizado entre noviembre y diciembre del pasado año.
 
El mencionado evento literario realizó, en el sesquicentenario chiclayano, algo que ya no es muy habitual en nuestro tiempo: la participación, de los estudiantes de todos los Grados del Nivel Secundaria, en una competencia poética y -dicho sea con énfasis y suma complacencia- con temática muy especial: la ecología. Y es que, verdaderamente, en la actualidad, resulta muy difícil convocar a casi todo un colegio, de la dimensión del Coloso del Norte, en un torneo literario, específicamente, lírico, y -valor al mérito de los organizadores Kathy Gonzáles y José Primo, y de los docentes asesores- con orientación e intencionalidades eminentemente medioambientalistas. El resultado: un libro materialmente hermoso y, lo que es más afortunado aún, con la presentación de un conjunto de benjamines poéticos de grandes talentos que,  desde ya, se constituyen como las nuevas y auspiciantes voces líricas de nuestro territorio lambayecano.

Benjamines Sanjosefinos es, desde el punto de vista de la promoción literaria, una flagrante realidad y, desde el ecologista, toda una promesa de movilización de conciencia medioambiental juvenil, que nos llena de ilusiones y nos instiga a creer, no sólo en la posibilidad del forjamiento de una nueva pléyade de poetas y escritores chiclayanos, sino, también, en el principio de un verdadero acontecimiento de cruzada por la protección de la naturaleza, de la magnitud que es importante generar en nuestros ciudadanos del hoy y del mañana. Por eso, en este trabajo -que congregó a la familia sanjosefina y al Club de Leones Los Parques de Chiclayo, básicamente-, se consigue, sobre todo, un fin fundamental: educar, a la sociedad lambayecana y nacional, en el amor por las entidades del espíritu y el valor de la defensa de nuestro planeta, modo sin precedentes en nuestro ámbito regional.

 Benjamines Sanjosefinos -ya lo hemos referido-, consta de la recopilación -finamente realizada por Kathy Gonzáles y José Primo- de la presentación de los textos poéticos de los ganadores del concurso y, asimismo, de los más distinguidos de otros participantes. Y hay, en este libro, un par de aspectos muy bien definidos que es muy importante destacar: el aprobado manejo de la palabra poética, por un lado, y por otro lado, la competitividad creativa y la imaginación desplegada por sus pequeños autores. Prueba de ello son, sin ninguna duda, los textos ganadores, pero, de la misma manera, un gran número de los otros poemas de la compilación. Resultaría extendido, por no decir, improbable, hacer en una sola nota, el comentario crítico adecuado, conveniente, oportuno, de los textos de los benjamines líricos sanjosefinos, pero, la percepción caótica de un mundo industrializado y postmoderno, el daño irreparable de la mano del hombre sobre la creación, las consecuencias funestas para la supervivencia de los seres vivientes por acciones de profanación, corrupción y contaminación del hábitat, así como, -antagónicamente-, la protesta contra la inversión del proceso de surgimiento y desarrollo de las fuentes de vida, la identificación con los planes, propósitos y acciones a favor de protección del ecosistema, el canto a la paz, al equilibrio y la armonía del universo, la plegaria e invocación a Dios como salida a la situación crítica y la resolución problemática, y, en general, el grande amor por la naturaleza y la creación, son temas recreados muy emotiva e ingeniosamente en el nuevo libro, y constituyen -junto a los recursos de estilo, todavía incipientes, y al lenguaje sencillo y directo, pero no por eso, falto de creatividad y de lirismo-, el a merveille (¡a maravilla!) bona fide (de buena fe) de la joven poesía sanjosefina, que nos hacen tener la certeza de que, así como nuestro mundo, todavía tenemos la oportunidad de creer y tener otras nuevas y grandes oportunidades, para ser de nuestro planeta el lugar, la parte del universo donde poder vivir en congruencia con todo lo existente. Para los benjamines del San José y para todos aquellos involucrados en esta magnifica tarea, muchas felicidades, y que Dios y la Naturaleza os guarde.
Para ver el texto completo hacer click en el siguiente enlace:
Ecopoesía San José -2010 en PDF o en la imagen de la carátula: